Día de las Madres: Por qué necesitamos las voces latinas en los sistemas de salud

Durante el mes de mayo, Esperanza United honra a las madres y a las figuras maternas que ayudan a mantener fuertes a sus familias. Sabemos por nuestro trabajo cuánta energía las madres Latinas y figuras maternas ponen para apoyar a sus familias. Algunos sobrevivientes hacen todo esto mientras experimentan abuso, lo cual, cuando lo piensas, es increíble en una realidad sombría. La comunidad, la familia y los niños a menudo brindan fortaleza a una gran cantidad de sobrevivientes Latinos, ya que, para muchos, es su razón para persistir. 

Las madres y las figuras maternas trabajan duro y a menudo experimentan estrés que afecta su salud y bienestar. Por varias razones, l@s sobrevivientes Latinos necesitan apoyo culturalmente receptivo, desde en el parto hasta en el mantenimiento de su autonomía corporal y en su su salud y bienestar en todas sus formas: física, mental, emocional, social y espiritual. La falta de personal que hable español y de servicios de salud culturalmente receptivos significa que l@s sobrevivientes Latinos tienen menos recursos disponibles para ellos. Esto afecta negativamente su salud, la salud de sus familias, y la salud de las comunidades en general.

Para much@s, nuestras figuras maternas son la primera línea de defensa contra los sistemas de salud desiguales y nuestras mayores defensoras. Por ejemplo, mi madre enfrentó desafíos con el acceso al idioma y con la atención culturalmente receptiva cuando estaba embarazada de mí. Fue un embarazo difícil ya que su primer proveedor no ofreció servicios de acceso lingüístico para garantizar que tuviera una toma de decisiones informada y que diera su consentimiento mientras recibía atención. Mi madre recuerda que este proveedor tenía prejuicios y que había usado tácticas de miedo hacia ella y mi padre, lo que creó estrés y le quitó autonomía a mi madre durante un momento de crisis, un momento en el que necesitaba apoyo de su proveedor pero no lo recibió. Mi madre es una de las muchas figuras maternas Latinas en los Estados Unidos que tiene esta experiencia con sus proveedores de salud. 

Después de esta experiencia negativa, mi madre se negó a ver a este proveedor nuevamente y se inclinó hacia su comunidad en busca de apoyo. A través de su comunidad, se conectó con un proveedor médico que escuchó sus preocupaciones, la ayudó a crear un plan para el resto de su embarazo, y le brindó atención culturalmente receptiva y acceso al idioma. Hoy, estoy aquí como profesional de salud pública de salud maternoinfantil, por mi mamá, mi familia y por la comunidad que apoyó a mi madre durante su embarazo. Fue a través de su defensa que se me permite estar aquí con ella hoy. Mi mami continúa enseñándome que la defensa, para ti mism@ y para los demás, es una de las formas más elevadas de amor y liderazgo. 

Los proveedores de atención médica y los proveedores comunitarios también son defensores y pueden prevenir experiencias negativas de atención médica y aumentar los resultados de salud positivos para sobrevivientes Latinos y sus comunidades. Con este conjunto de herramientas para proveedores médicos y proveedores comunitarios, los proveedores médicos y comunitarios aprenden el impacto que tienen en la salud de sobrevivientes Latinos y los pasos prácticos que pueden dar para prevenir la violencia al adaptar la capacidad de respuesta cultural y la atención informada sobre el trauma en sus prácticas. Alentamos a l@s proveedores médicos y a l@s proveedores comunitarios a crear seguridad para l@s sobrevivientes, a reconocer prejuicios y a trabajar a través de ellos, y a reconocer las realidades de figuras maternas y sobrevivientes Latinas.