Justicia para mujeres migrantes

Como parte de nuestra serie que destaca a los miembros de nuestra red, conozca una organización que marca la diferencia en las vidas de sobrevivientes. En esta conversación hablamos con la fundadora y presidenta de Justicia para Mujeres Migrantes, Mónica Ramirez.

¿Qué le llevó al trabajo de violencia sexual y de apoyar a sobrevivientes?

Comencé mi trabajo porque la violencia de género era algo que estaba en mi conciencia desde que era niña. La violencia doméstica y sexual son problemas que viví y he sobrevivido desde que tengo memoria. La violencia, desafortunadamente, fue un lente a través del cual vi el mundo. Dictó muchas de las decisiones que tomé en mi vida sobre cómo estar en el mundo, principalmente tratando de descubrir cómo manejarla y evitarla. Esta conciencia me hizo querer hacer todo lo posible para detener la violencia y apoyar a sobrevivientes. Mientras hacía mi propio trabajo en torno a estos problemas y luego manejaba mi propia supervivencia, las brechas en los servicios, la atención, la educación y el apoyo general siempre estuvieron presentes. Mi trabajo es mi manera de hacer lo que puedo para tratar de hacer el mundo un poco más seguro y el camino de los sobrevivientes hacia la curación un poco más fácil.

¿Qué hace actualmente en su posición para apoyar a sobrevivientes de violencia sexual? 

El corazón del trabajo de Justicia para Mujeres Migrantes es apoyar a las mujeres migrantes que son sobrevivientes de violencia sexual. Entendemos que muchos temas están interconectados, por lo que nuestro trabajo no solo se centra en la violencia sexual. Se centra en todos los problemas que se cruzan y hacen que las personas sean vulnerables a la violencia de género. No podemos hablar de violencia contra las mujeres migrantes, rurales y latinas, las personas a las que principalmente he tenido el honor de servir a lo largo de mi carrera, sin hablar de pobreza, aislamiento, falta de infraestructura, racismo y todas las formas de discriminación y prejuicio de género. Ayudamos a las personas a comprender cómo todos estos problemas afectan directamente a las mujeres migrantes que viven en zonas rurales de Estados Unidos, muchas de las cuales también son sobrevivientes de violencia sexual. Por último, queremos asegurarnos de que las mujeres migrantes sean las que tomen las decisiones sobre los problemas que impactan directamente su bienestar.

¿Cómo podemos apoyar a los seres queridos que han sido afectados por la violencia sexual? 

Escuchar y creer en los sobrevivientes son dos de los trabajos más importantes que tenemos cuando se trata de apoyar a sobrevivientes. Muchas de las mujeres con las que trabajamos a menudo tienen miedo de hablar por temor a ser deportadas o perder sus trabajos. Es fundamental crear un espacio seguro y apoyar a estas  mujeres valientes y a sus seres queridos que también se ven afectados. Otro papel clave que tenemos es proporcionar información sobre servicios y apoyo que podrían ayudar a las personas que acuden a nosotros.

¿Qué consejo les daría a los defensores que trabajan con sobrevivientes latin@s de violencia sexual durante la pandemia? 

Mi mejor consejo para defensores que apoyan a sobrevivientes latinx es que no hagan suposiciones. Mucha gente hace suposiciones sobre quiénes somos y qué nos importa como comunidad. Nuestra comunidad es vasta y compleja. Tenemos diferentes historias y experiencias migratorias. Algunos de nosotros hablamos español y otros no. Algunos de nosotros somos profundamente religiosos y otros no. No existe una solución única para el cuidado de nuestra comunidad. También es problemático hacer generalizaciones o estereotipos de sobrevivientes porque somos de una determinada comunidad o de una determinada etnia. Los defensores deben tomarse el tiempo para escuchar al sobreviviente y comprender realmente su situación y necesidades individuales antes de intentar aplicar un plan general de apoyo. No existe una “guía para sobrevivientes latinx” que realmente capture las experiencias vividas y las necesidades de todos y cada uno de nosotros en nuestra comunidad. Comience cada plan de atención centrando al individuo, sin importar de qué comunidad provenga.

¿Cómo practica usted el bienestar y el autocuidado? 

 Soy un trabajo en progreso. Tengo que hacerlo mucho mejor cuando se trata de cuidarme porque amo mucho mi trabajo y mi trabajo también es muy duro para mi corazón porque llevo el dolor de tanta gente. La mejor decisión que tomé para mí fue ver a un terapeuta con regularidad. He intentado cambiar mi dieta, ejercicio y hábitos de dormir para centrarme en mis necesidades a largo plazo en lugar de campañas o ganancias a corto plazo que estamos tratando de asegurar. También estoy tratando de ser realmente disciplinada al decir que no. Mi tiempo más valioso es el tiempo con mi familia, así que estoy tratando de hacer todo lo posible para decir no a las cosas adicionales y sí al tiempo con mis seres queridos.